Punto:
DESAFÍOS PARA LA
FAMILIA ACTUAL
FRASE:
“La fuerza de la familia reside esencialmente en su
capacidad de amar y enseñar a amar.”(1)
Contexto:
La primera
consulta sinodal sobre la familia, que el Papa Francisco convocó, arrojó
diversidad de situaciones de la familia actual que plantean desafíos a la
función esencial de ésta. En la segunda consulta se definió el trabajo de
los sinodales para dar respuesta a dichos desafíos y es la Exhortación
Apostólica “Amoris laetitia, en el contexto del Año Jubilar de la Misericordia,
la que propone y estimula a las familias cristianas a sostenerse en el amor
fuerte; así mismo, procura, como júbilo de la Iglesia, dar signos de
misericordia y cercanía antes esos desafíos. Desde la perspectiva nacional mexicana, algunas de las situaciones desafiantes que afrontan las familias hoy y que la Exhortación resalta son: la drogodependencia, entre la población de 12 a 65 años, el 3.3% de hombres y el .9% de mujeres consumen algún tipo de droga(2); en el mismo rango de personas el alcoholismo arroja que una de cada tres personas tiene dependencia al alcohol (3); por otro lado la ludopatía, el juego, por la proliferación de casinos, así como otras adicciones han incrementado la destrucción de la cohesión familiar, desencadenando también en la violencia intrafamiliar (física, psicológica o económica). Ante las deficientes soluciones políticas y sociales a estas problemáticas se observa un incremento del 22% en los divorcios (4). Como consecuencia de esto aumenta continuamente la situación de hijos desarraigados, ancianos abandonados y jóvenes desorientados.
Experiencia:
Es notable que
la debilidad de la familia, perjudica la maduración de las personas, por lo que
dificulta las relaciones humanas básicas, no sólo entre sus miembros sino de
estos con la comunidad. Sin embargo, es importante destacar que se
reconoce la variedad de situaciones familiares, que lejos de ser consideradas
perfectas, viven en el amor, realizan su vocación y siguen adelante a pesar de
las caídas a lo largo del camino, brindando cierta estabilidad a sus
miembros. Por otro lado, algunas ideologías que promueven la no
diferenciación del género humano, así como querer equiparar las relaciones de
parejas del mismo sexo con el matrimonio, que están siendo apoyadas por
gobiernos y grupos afines, van en detrimento del fundamento antropológico de la
familia. Comprender la fragilidad humana y su complejidad, no niega el llamado
a custodiar la inseparable realidad de hombre-mujer-procreación. La
exhortación señala “lo creado nos precede y debe ser recibido como don”.
Reflexión:
Desde una visión
laica de familia y limitada a nuestra localidad, se piensa que el trabajo
de los dos sínodos a pesar de no alcanzar totalmente el objetivo de ser
precedida por una consulta laical suficientemente participativa, logra poner
sobre la mesa la realidad de la familia y sus desafíos. Nos sentimos invitados
por el Papa Francisco a reflexionar sobre los retos que se presentan, unir esfuerzos desde la praxis pastoral de Iglesia,
para alentar, estimular y acompañar a las familias en sus dificultades. Y
como concluye “La Alegría del Amor”, esta nueva visión de familia, formada por
realidades diferentes, llenas de gozos, dramas y sueños, libera en
nosotros las energías de la esperanza para la continua búsqueda de acciones
transformadoras.
Acción:
La
invitación a despertar como laicos a la creatividad misionera nos enfrenta a
cuestionarnos y proponer acciones: ¿Me siento realmente confrontado ante estas
realidades? ¿Cómo puedo acompañar a familias que afrontan dificultades para
tener la capacidad de generar amor entre sus miembros? ¿De qué manera convivo
con familias de realidades diferentes? ¿Qué ayudaría más a mi familia para
fortalecerla en la alegría y el amor?
Además sugerimos
que en la pequeña comunidad a la que se pertenezca o con grupos de amigos, en
la familia misma, dar lectura pausada de los temas del documento Amoris
Laetitia, reflexionar sobre ellos y discernir la posible concreción de
actitudes de apertura y aceptación que ayuden a acompañar y fortalecer a las
familias, incluyendo las nuestras, en su capacidad de amar y enseñar a
amar.
Evaluación:
¿He
podido ser buscador de la mejor manera de colaborar en las propuestas
planteadas? ¿He podido liberar en mí la energía de la esperanza transformadora
del amor de la familia? ¿He confrontado continuamente mis deseos, para
confirmarlos con el camino de júbilo de Jesús y su Iglesia?
Bibliografía,
referencias/ fuentes
1. Exhortación Apostólica Postsinodal “Amoris laetitia”
2. La Secretaría de Salud, a través del Centro Nacional para la
Prevención y el Control de las Adicciones (CENADIC) y de la Comisión Nacional
contra las Adicciones (CONADIC) “Encuesta Nacional de Adicciones 2011” (ENA
2011).
3. Consejo Nacional contra las Adicciones (CONADIC) 2013.
4. INEGI 2013
Ante las dificultades y la diversidad de las trampas / engaños, nos invita el Evangelio a ser Tolerantes y Respetuosos de las personas ... que es <> a aceptar todo...
ResponderEliminarRecuerdo que hace unas semanas en un grupo de whatsapp compartieron un video en donde se expresaba una opinión en contra de la propuesta de EPN sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo y contra la ideología de género. Mi postura ante esa opinión fue que como familia(s) deberíamos preocuparnos más que por salir a protestar airada y apasinadamente en contra de esta propuesta de ley, por encontrar maneras de como tener mejores relaciones familiares, mas amorosas, estables, que a todos nos hagan mejores personas. Nos cuesta mucho trabajo hablar de nuestras propias familias, de nuestras heridas familiares. Creo que vale la pena reflexionar sobre ello.
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