domingo, 15 de febrero de 2015

LA FRASE DE LA SEMANA

CORRESPONDIENTE AL EVANGELIO DE HOY PARA REFLEXIONAR TODA LA SEMANA
PARA VER EL EVANGELIO COMPLETO CLIC AQUÍ: Mc. 1, 40-45

“Si quieres, puedes limpiarme de mi enfermedad”

VI Domingo del Tiempo Ordinario – Ciclo B (Marcos 1, 40-45) – 15 de febrero de 2015
Alcohólicos Anónimos (A.A.) es una organización fundada en 1935 por un corredor de bolsa de Nueva York y un médico de Ohio (ambos ya fallecidos), que se consideraban borrachos desesperados. Su intención era ayudar a otros que sufrían de la enfermedad del alcoholismo. A.A. creció con la formación de grupos autónomos, primero en los Estados Unidos y luego por todo el mundo.
En virtud de que la ciencia médica dictaminó que el alcoholismo es una enfermedad, la persona deberá tomar en cuenta que nadie puede rehabilitarse si no se acepta la enfermedad. Entonces la persona, que con sinceridad quiere dejar de beber, debe aceptar su incapacidad por controlar la bebida; de lo contrario le podrá causar la locura o la muerte prematura. Por tanto, el criterio con el que se trabaja en A.A. es que los alcohólicos son personas enfermas que pueden recuperarse si siguen un sencillo programa que ha demostrado tener éxito para más de dos millones de hombres y mujeres a lo largo y ancho del mundo. La experiencia demuestra que el programa de A.A. funcionará para todos los alcohólicos que son sinceros en sus esfuerzos por dejar de beber y que, por lo general, no funcionará para aquellos que no tienen la certeza absoluta de que quieran hacerlo.
Los Doce Pasos de A.A. son los siguientes: (1) Admitimos que éramos impotentes ante el alcohol, que nuestras vidas se habían vuelto ingobernables. (2) Llegamos a creer que un Poder superior a nosotros mismos podría devolvernos el sano juicio. (3) Decidimos poner nuestras voluntades y nuestras vidas al cuidado de Dios, como nosotros lo concebimos. (4) Sin miedo hicimos un minucioso inventario moral de nosotros mismos. (5) Admitimos ante Dios, ante nosotros mismos, y ante otro ser humano, la naturaleza exacta de nuestros defectos. (6) Estuvimos enteramente dispuestos a dejar que Dios nos liberase de todos estos defectos de carácter. (7) Humildemente le pedimos que nos liberase de nuestros defectos. (8) Hicimos una lista de todas aquellas personas a quienes habíamos ofendido y estuvimos dispuestos a reparar el daño que les causamos. (9) Reparamos directamente a cuantos nos fue posible el daño causado, excepto cuando el hacerlo implicaba perjuicio para ellos o para otros. (10) Continuamos haciendo nuestro inventario personal y cuando nos equivocábamos lo admitíamos inmediatamente. (11) Buscamos a través de la oración y la meditación mejorar nuestro contacto consciente con Dios, como nosotros lo concebimos, pidiéndole solamente que nos dejase conocer su voluntad para con nosotros y nos diese la fortaleza para cumplirla. (12) Habiendo obtenido un despertar espiritual como resultado de estos pasos, tratamos de llevar este mensaje a los alcohólicos y de practicar estos principios en todos nuestros asuntos.
El leproso que se acerca a Jesús, pidiendo ser curado de su enfermedad, necesitó reconocerla primero y, al mismo tiempo, confió en que este profeta tenía la fuerza para sanarlo. El Señor le pide que solamente cumpla con las ofrendas que manda la ley de Moisés por su curación, pero que no se lo diga a nadie más; sin embargo, el leproso “se fue y comenzó a contar a todos lo que había pasado”. Como los alcohólicos anónimos, no podía dejar de llevar a otros el mensaje de su propia experiencia de salvación.
Hermann Rodríguez Osorio, S.J.

sábado, 14 de febrero de 2015

PARTICIPACIÓN CIUDADANA desde la Espiritualidad


 

Punto
Incidencia socio-política desde la espiritualidad ignaciana: PARTICIPACIÓN CIUDADANA.

Contexto:
En este mes ha comenzado la carrera electoral en México, para que el próximo 7 de junio (en el estado de Chiapas el 19 de julio) se lleven a cabo las elecciones1 Federales del Poder Legislativo (500 de Diputados), Estatales (10 Gobernadores y 17 Congresos Locales) y Municipales (715 ayuntamientos), para diversos “cargos de gobierno”, con una inversión estimada de $37 mil millones de pesos (para organizar las elecciones y participación de los partidos políticos)2, 3
Pero, ¿para qué son las elecciones? ¿a quienes se va a elegir?¿qué beneficio tiene la sociedad y la gente que la formamos? … sin embargo, la pregunta más importante es: Yo, ¿Cómo participo, cómo elijo que hacer con mi voto, cómo busco el bien social?

Experiencia:
Para quien tenemos la espiritualidad ignaciana, los términos discernir, elección y confirmación, nos son familiares; para vivir nuestra espiritualidad en la vida ordinaria, somos llamados a ser contemplativos en la acción; en este contexto electorero, partiremos de contemplar la realidad del país, de nuestro estado y municipio donde vivimos para luego hacer la elección de que hacer con mi voto (en las diversas elecciones que me corresponden). Sin olvidar, obviamente, la perspectiva de que mi fin último es colaborar para hacer presente el Reino4, en mi comunidad. O sea, nuestra espiritualidad puede ser aterrizada en esta jornada electoral, a través de elegir a quienes dar mi voto, con el fin de colaborar en la mejor elección de los “cargos de gobierno” para el bien común de la comunidad.

Estas cápsulas pretenden ser un espacio para:
(a) Fortalecer la dimensión sociopolítica del compromiso ignaciano en las CVX (y cristiano en general), subrayar la importancia de la vida política en la construcción del Reino como elemento permanente en la vida de nuestras comunidades  y
(b) Proporcionar información para que cada persona de las comunidades pueda elegir su propio camino de cara a las elecciones del junio del 2015.

Termino citando: "No quiero -dice Nadal, compañero de San Ignacio-que seas espiritual y devoto solamente en misa o en la oración. Quiero que seas también devoto y espiritual cuando estás en la acción, para que en todas tus obras resplandezca la fuerza plena del espíritu, de la gracia y de la devoción".

Reflexión:
Comparte en el foro de esta publicación: ¿qué opinas sobre el proceso electoral? ¿cómo te ayudará tu espiritualidad a vivir este momento democrático?

Acción:
¿cuál es tu distrito electoral? ¿sabes dónde estará tu casilla para emitir tu voto? ¿por cuáles cargos públicos te toca votar, quienes son los pre-candidatos? Investiga y comparte….


Bibliografía, referencias/ fuentes.

domingo, 8 de febrero de 2015

LA FRASE DE LA SEMANA

CORRESPONDIENTE AL EVANGELIO DE HOY PARA REFLEXIONAR TODA LA SEMANA
PARA VER EL EVANGELIO COMPLETO CLIC AQUÍ: Mc. 1, 29-34


sábado, 7 de febrero de 2015

Reflexiones sobre Incidencia Socio-política



REFLEXIONES IGNACIANAS SOBRE INCIDENCIA SOCIO-POLÍTICA

Estimados cevequian@s (gente CVX-CLC) y amig@s con espiritualidad ignaciana, los invitamos a participar durante los siguientes meses mediante el ANÁLISIS, la MEDITACIÓN y la CONTEMPLACIÓN sobre las diversas realidades sociales, económicas y políticas que vive México, en las reflexiones semanales sobre

INCIDENCIA SOCIO-POLÍTICA

de tal manera que podamos descubrir cómo el Espíritu Santo nos invita a tomar acción y participar con sabiduría en la construcción del Reino durante el proceso electoral 2015.

Aprovechemos esta oportunidad para fomentar el diálogo, la conciencia social y la participación ciudadana entre nosotros los cevequian@s y ser verdaderos agentes de cambio en nuestra sociedad.

PROGRAMA DE REFLEXIONES

  1. Fundamentos de la espiritualidad ignaciana para la participación ciudadana (14-02-15)
  2. Realidad política de México (21-02-15)
  3. Realidad socioeconómica de México (28-02-15)
  4. Realidad socioeconómica de México (07-03-15)
  5. Realidad socioeconómica de México (14-03-15)
  6. 1er Encuentro virtual (21-02-15)
  7. Poder Legislativo (28-03-15)
  8. Gobernadores y Ayuntamientos (04-04-15)
  9. Otras opciones de participación ciudadana (11-04-15)
  10. Plataformas electorales de partidos políticos (18-04-15)
  11. Plataformas electorales de partidos políticos (25-04-15)
  12. 2o Encuentro virtual (02-05-15)
  13. Opciones al momento de la votación: votar por partido, voto nulo, abstención (09-05-15)
  14. La política: ¿opción comunitaria o individual? (16-05-15)
  15. 3er Encuentro virtual. Conferencia de cierre (23-05-15)

domingo, 1 de febrero de 2015

“Después que metieron a Juan en la cárcel...”

IV Domingo del Tiempo Ordinario – Ciclo B (Marcos 1, 21-28) – 1 de febrero de 2015
Dicen que un hombre se lanzó de un avión en su paracaídas y al llegar a tierra quedó colgado de un árbol, sin poder bajarse. Cuando pasó alguien por allí, el hombre que pendía del árbol preguntó: “– ¿Podría usted decirme dónde estoy?” “– Desde luego. Usted está colgado de un árbol”, respondió el transeúnte. El hombre que colgaba del paracaídas preguntó entonces: “– ¿Es usted sacerdote?” “– Si – respondió el transeúnte. – ¿Cómo lo supo?” “– Porque lo que usted dice es verdad, pero no sirve para nada...”.
Esta historia refleja un tipo de enseñanza contraria a la de Jesús, que enseñaba de una manera nueva, “con plena autoridad y no como los maestros de la ley”. Enseñar con autoridad es enseñar de tal manera que se ayude a los demás a encontrar solución a sus problemas y sentido a sus vidas. No se trata sólo de cosas útiles y prácticas, sino de un tipo de enseñanza que ayuda a las personas a ser ‘autores/as’ de sus vidas. Esto es lo que significa ‘autoridad’. Por tanto, una persona que enseña con autoridad no sólo ofrece información sobre los temas que trata, sino que ayuda a vivir más plenamente la vida, encontrando su sentido más profundo.
Todos hemos conocido, a lo largo de nuestra formación, profesores y profesoras que nos han enseñado cosas de interés e importancia para nuestro crecimiento intelectual, y los hemos considerado buenos y necesarios. Pero, seguramente, también hemos tenido algunos maestros y maestras que nos han enseñado a vivir con sentido. Estos son indispensables. Desgraciadamente, son más escasos y podemos decir que encontrar un verdadero maestro o una verdadera maestra, es una de las bendiciones más grandes que Dios nos puede conceder para nuestro crecimiento como seres humanos. Sin ellos, la vida sería mucho más difícil y los caminos de este mundo, menos amables.
De igual forma, podríamos preguntarnos por nuestro papel como docentes. Lo que enseñamos a los que nos rodean, se parece más al tipo de enseñanza de Jesús, o a la manera de enseñar del sacerdote de la historia con la que comenzamos. Podemos comunicar cosas que son verdad, pero que no sirven para nada, o enseñamos haciendo vida lo que decimos: “Jesús reprendió a aquel espíritu, diciéndole: – ¡Cállate y deja a este hombre! El espíritu impuro hizo que el hombre le diera un ataque, y gritando con gran fuerza salió de él. Todos se asustaron, y se preguntaban unos a otros: – ¿Qué es esto? ¡Enseña de una manera nueva, y con plena autoridad! ¡Incluso a los espíritus impuros da órdenes, y lo obedecen!”
Pidamos para que nuestra forma de enseñar sea como la de Jesús. Llena de autoridad para ayudar a las personas que tenemos cerca, a crecer y vivir más plenamente, de manera que si alguien que cuelga de un árbol en el que se ha enredado su paracaídas, nos pregunta dónde está, podamos ofrecerle no sólo la información que ya tiene, sino las coordenadas de su ubicación, de manera que pueda encontrar el rumbo hacia su propia casa.
Hermann Rodríguez Osorio, S.J.

LA FRASE DE LA SEMANA

CORRESPONDIENTE AL EVANGELIO DE HOY PARA REFLEXIONAR TODA LA SEMANA
PARA VER EL EVANGELIO COMPLETO CLIC AQUÍ: Mc. 1. 21-28